El Ministerio de Ambiente necesitaba una solución de trazabilidad para gestionar y mejorar los residuos industriales de todo el país. Centrándose en mejorar la sustentabilidad y resolver los problemas relacionados con la eficiencia, alcance y calidad de los servicios prestados a los involucrados.

CONECTAMOS A LOS INVOLUCRADOS PARA GENERAR UNA CORRECTA ELIMINACIÓN DE RESIDUOS PELIGROSOS

Una fase clave de nuestro proyecto fue el proceso de descubrimiento del producto. Empezamos con un taller de Design Thinking que incorporaba dinámicas de clasificación de tarjetas, centradas en definir el flujo básico de residuos desde su generación hasta el tratamiento final. Durante este proceso, identificamos los puntos débiles, los conflictos entre las partes interesadas y las áreas clave de intervención.

Para conocer a fondo los procesos implicados, visitamos a diversas partes interesadas en distintas regiones del país. Con esta información, abordamos las preguntas fundamentales (quién, qué, cuándo, dónde y por qué), obteniendo así una visión global del problema.

Los valiosos conocimientos adquiridos durante este proceso fueron esenciales para la creación de un cono de visión. Este enfoque nos permitió explorar con precisión las necesidades actuales del cliente y diseñar soluciones alineadas con los objetivos propuestos.

Gracias a la geolocalización y al Índice de Reputación de Proveedores (PRI), nuestra solución ayuda a tomar decisiones empresariales en cada paso del proceso, lo que se traduce en una gestión más rápida, mejor y más fiable de los residuos, con un gran impacto en la productividad, la capacidad, el tiempo de respuesta y la comunicación entre todas las partes interesadas.

Solo en el primer año, nuestra solución ganó 3 premios diferentes del Gobierno uruguayo, la Red de Innovación de América Latina y la Cámara de Comercio Industrial en reconocimiento al impacto, la innovación y la ejecución del proyecto.